Cuando me enteré que iba a ser papá, empezó el dilema de que nombre le íbamos a poner a nuestro hijo o hija.
Como todavía no sabíamos si nuestro hijo iba a ser
hombre o mujer, no sabíamos cual nombre podríamos ponerle, así que lo que
hicimos fue una lista de varias opciones, siempre dos nombres, a mí no me gusta
que solo tenga un nombre, siento como si faltara algo, así que hicimos nuestro
ranking.
Varios nombres fueron apareciendo,
desde los más comunes y simples hasta los más elaborados pero siempre tratando
de que se lleven bien con los apellidos nada complejos como los nuestros, simplemente Palacios Espinoza.
La lista de opciones se empezó a poner kilométrica,
obviamente para ambos sexos, y luego de varias semanas y varias encuestas a la
familia logramos obtener los más votados, pero siempre quedo claro que el
nombre final lo íbamos a escoger nosotros dos como pareja.
A mí siempre me han gustado los nombres
Gabriela y Sofía, como no sabíamos cuantos hijos podríamos tener, pero la proyección
a futuro era de tratar de tener la parejita elegimos dos nombres por si era
mujer y dos nombres por si era hombre (no vale copiarse ya)
- Gabriela del Carmen
- Mahra Sofía
- Mariano Gabriel
- Joaquín Manuel
Nosotros no hicimos ninguna investigación
en internet para averiguar significados, orígenes, signos, estrellas y todo lo
relacionado a eso, solo pensamos en los que más nos gustaban y los que mejor
sonaban con nuestros apellidos.
Que quede claro que nosotros si queríamos
saber el sexo del bebe, sé que hay parejas que prefieren esperar al día del
nacimiento para tener la sorpresa, pero nosotros quisimos simplificarnos la
vida, para tener todo listo, preparado y sin preocupaciones.
Luego de eso ya solo teníamos que esperar a que
las ecografías nos dieran la gran respuesta a esa increíble incógnita.
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